Las políticas de mitigación para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de la agricultura son renegociadas periódicamente y necesitan incluir resultados a nivel regional. La gestión de los suelos agrícolas tiene un gran potencial para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero o el secuestro de carbono. Muchas de las prácticas se basan en un extenso conocimiento agronómico y técnico, con beneficios demostrados para los agricultores y el medio ambiente. Sin embargo, existen limitaciones en el proceso de desarrollo de políticas ya que (a) las actividades agrícolas se basan en procesos biológicos y, por tanto estas prácticas tienen que ser determinadas en cuanto a la localización, el clima, los suelos y el tipo de cultivos; (b); la agricultura sustenta las comunidades rurales, y por tanto los costes y potenciales para la implementación necesitan ser evaluados a nivel regional y; (c) el potencial regional agregado del uso combinado de estas prácticas tiene que ser definido con el fin de alcanzar los compromisos de reducción.

Este estudio en el que han colaborado tres miembros de la red Remedia (Ana Iglesias, Jorge Álvaro-Fuentes y Berta Sánchez), proporciona información regional sobre los vínculos entre la mitigación del cambio climático y la economía de la gestión agrícola sostenible. Creemos que, en la aplicación de prácticas de mitigación, tres preguntas son importantes: ¿Son rentables para los agricultores? ¿Se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero? ¿Qué políticas favorecen su aplicación

Marco metodológico del estudio

El estudio abordó estas cuestiones en tres pasos secuenciales. En primer lugar, se represento el contexto espacial a nivel regional en Europa mediante un mapeo sobre el uso de prácticas de mitigación más representativas para el manejo de suelos. En segundo lugar, se estimó el potencial de estas prácticas en términos de coste-efectividad generando una curva de Coste Marginal de Reducción de GEI, o curva MACC, en un estudio de caso del Mediterráneo (NE España). Finalmente, el análisis cualitativo se completó con una discusión de las posibles opciones vinculando los resultados científicos con la política regional de mitigación.

MACC para las prácticas de manejo de suelos y cultivos en NE España (Aragón)

La curva MACC prioriza las prácticas de manejo para diferentes cultivos, de acuerdo a su potencial anual de mitigación (eje x en MtCO2e y-1) y coste (eje y en € / tCO2e ha-1 año-1). El eje y muestra el cambio en el margen bruto, las prácticas con valores negativos o por debajo de cero en realidad indican un aumento en los márgenes o un ahorro de los costes. El eje x muestra el potencial anual de mitigación por cultivo y para toda la región de estudio (Aragón), y dado que las prácticas se consideran aditivas, la reducción se contabiliza como acumulada. Los resultados muestran que las prácticas de gestión del suelo pueden ser económicamente atractivas para los agricultores mediterráneos, y a su vez lograr reducciones significativas (por ejemplo, 1.34 MtCO2e en la región de Aragón).

Link del artículo: http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0301479716300032

Sánchez B, Iglesias A, McVittie A, Alvaro-Fuentes J, Ingram J, Mills J, Lesschen JP, Kuikman P (2016) Management of agricultural soils for greenhouse gas mitigation: Learning from a case study in NE Spain. Journal of Environmental Management, 170, 37-49. DOI: 10.1016/j.jenvman.2016.01.003